viernes, 28 de agosto de 2015

La falsa creencia sobre la fianza en los alquileres: el casero no tiene 30 días para devolverla

En muchas ocasiones se oye aquello de que “el arrendador tiene un mes 
para devolver la fianza del alquiler”. Sin embargo, este plazo no viene 
determinado por ninguna ley, con lo que el argumento es falso. 
La fianza debe ser restituida al inquilino justo al final del contrato del alquiler.
La fianza es el mínimo legal obligatorio que debe exigir el casero y que 
debe prestar el inquilino, aunque es posible que el arrendador solicite garantías 
adicionales, como un depósito, un avalista que garantice con su patrimonio 
el cumplimiento de las obligaciones del inquilino, o un aval bancario, que 
es cuando el banco es el que avala hasta un determinado importe.
El inquilino no puede dejar de pagar el último (o últimos meses) para que 
el casero se los cobre de la fianza y éste tampoco puede retener la fianza sin 
justificación alguna ni tampoco usarla para pagar la limpieza o la pintura 
del piso a la terminación del arrendamiento.

Entonces, ¿cómo se hace la devolución de la fianza?

Hay una creencia generalizada a pensar que el propietario tiene un mes para devolverla pero esta afirmación es “totalmente falsa”. Sostiene que la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) nada establece al respecto. Así, si no hay obligaciones pendientes, debe devolverse la fianza en el mismo momento de terminación del contrato. En cambio, si hay obligaciones pendientes existen dos alternativas:
- Detallar las obligaciones pendientes y cuantificarlas por acuerdo entre las partes, cerrando así la puerta a futuras reclamaciones.
- En caso de no poder cuantificarse, será necesario establecer mecanismos para la cuantificación de las obligaciones pendientes y establecer los plazos y mecanismos para la liquidación del contrato, debiendo el arrendador acreditar los importes mediante la presentación de las facturas correspondientes.
En ambos supuestos, en caso de haber sobrante deberá ser reintegrado por el arrendador al arrendatario inmediatamente, mientras que si el importe de las obligaciones pendientes es superior a las garantías entregadas, será el arrendatario quien deba abonarlo.

¿Por qué hay lugar a confusión con la entrega de la fianza?

El artículo 36.4 LAU señala que la fianza devengará el interés legal, transcurrido un mes desde la entrega de las llaves por el inquilino sin que se hubiere hecho efectiva dicha restitución. Por tanto, no regula el plazo de devolución de la fianza, si no el retraso en la devolución. ¿Y por qué? Porque existe obligación de depositar la fianza en los organismos autonómicos señalados al efecto y todos ellos tienen un plazo de un mes para proceder a la devolución de la fianza al arrendador.
Pero el propietario no puede señalar el retraso de la administración correspondiente en la devolución de la fianza como causa para retrasarle la entrega al inquilino. Por tanto, su obligación es independiente del plazo que tarde la administración en su devolución.
artículo visto en idealista/news

viernes, 21 de agosto de 2015

Los errores más típicos que se cometen al vender una vivienda

Ahora que el mercado inmobiliario se está reactivando muchos propietarios aprovechan para subir el precio de la vivienda que quieren vender. Pero hay que tener cuidado porque la recuperación no está siendo homogénea y esto solo servirá para alejar a los posibles compradores. Otro error que puede dar al traste la operación es ocultar información sobre la situación real del inmueble.
Los errores más comunes a la hora vender una casa, son los siguientes:
1.- Poner un precio equivocado: en líneas generales los vendedores suelen valorar su vivienda por encima del precio del mercado y más ahora que parece que se está recuperando. Además, suele haber un componente emocional muy fuerte que lleva al vendedor a poner un precio más elevado del de mercado. Pero esto provoca un descenso de posibles interesados en la compra. Es aconsejable asesorarse bien por un experto inmobiliario que conozca el precio de la zona y sepa hacer  un exhaustivo estudio de mercado personalizado.
2.- Ocultar información del inmueble: es importante que toda la información sea clara y abundante mediante fotos, vídeos y documentación. Lo mejor es que el cliente no se sorprenda cuando vaya a ver el piso in situ. Por eso es relevante que si se dice que tiene wifi o trastero, realmente lo tenga o que esté al corriente de pago de la comunidad de propietarios.
3.- Evitar vender sin reformar: un piso reformado tiene más posibilidades de venderse que otro que no lo está. Lo aconsejable es mostrar la vivienda en el mejor estado posible y es necesario hacer reforma allí donde se necesite. 
4.- Poner en valor las ventajas de la casa: toda vivienda tiene sus puntos fuertes, así que hay que potenciarlos, como por ejemplo, si tiene techos altos, si cuenta con parqué, con habitaciones muy amplias o si está bien comunicado. Cuanta más información se dé, más posibilidades de venta.
5.- Decoración muy personal: hay que tener en cuenta los beneficios de enseñar casas despersonalizadas y desvinculadas emocionalmente de sus dueños. 
artículo visto en idealista/news

viernes, 7 de agosto de 2015

¿NO SABES QUE LEER ESTE VERANO? INTERNET TE AYUDA. Y LOS LIBREROS.

¿Se te ha antojado irte de vacaciones con una lectura divertida, picantona, breve y optimista? ¿Estás de un intenso que no te aclaras y necesitas una historia tormentosa, compleja y perturbadora para leer sobre la tumbona? ¿No te apetece vagar sin descanso por los estantes de la librería del barrio ni plantearte galimatías a tus amigos más bibliófilos? Internet, una vez más, acude en tu rescate, y como siempre, te evita pensar demasiado y tener que relacionarte con otros seres humanos.

Para estar a la última

¿Sabes que puede tener un alma gemela lectora? ¿Una media naranja de biblioteca? La red social Tú qué lees te la localiza para que te inspires ojeando sus títulos favoritos y vivas un flechazo intelectual. Si quieres estar en la vanguardia editorial, su sección Próximas publicaciones informa de los libros que saldrán a la venta en fechas cercanas. Quelibroleo recurre a tu lectura presente para vaticinar próximos encuentros altamente satisfactorios gracias a su recomendador, mientras que Library Thing y su diseño un tantonoventero reúne a 1.900.000 lectores y los conecta según sus gustos literarios, además de contar con una sección local para recomendar bibliotecas, librerías y firmas de libros cercanos a los usuarios y promover el reseñismo amateur con libros prepublicados gratuitos.

Según destino vacacional

Ya moviéndonos en mundillos angloparlantes, porque al ser productos de la LOGSE estamos preparados para ello, recalamos en WhatshouldIreadnext, que con un sencillo sistema nos ofrece una batería generosa de títulos si le chivamos uno que nos haya gustado. Por ejemplo, para Solaris nos responde con Lovecraft, Philip K. Dick o Thomas Pynchon. No va desencaminado. Para el periodo estival han desarrollado una página hermana, WhereshouldIreadnext, que sugiere títulos teniendo en cuenta el lugar de destino vacacional. ¿Cómo te quedas?

Afinidades más o menos sui generis

Superado una vez más el impacto estético, recomendamos Gnooks. A través de tus autores favoritos, la web te plantea un mapa de otros que se encuentran más o menos cerca de su estilo y temática. En el caso de Cervantes, Molière, Rabelais y Laurence Sterne. En el de Stephen King, Anne Rice, George R. R. Martin y J.K. Rowling. ¿Qué pensarían los implicados?

¿Lo quieres con mucho o poco sexo?

Y ahora, la joya de la corona: Whichbook. Además de sus listas con descriptivos títulos (Pártete de risa, Zona de confort, Cortos y dulces, Una extraña belleza), lo que enamora de su sistema de recomendación es la posibilidad de elegir entre 12 pares de adjetivos contrapuestos cuatro, graduando cuánto queremos que se acerque a uno y se aleje de otro. ¿Lo quieres con mucho sexo, perturbador, realista y largo, para esas tardes calurosas de piscina? Whichbook dice que te gustarán Las feroces aprendices Wang (Bi Feiyou). También puedes escoger en función de personaje (afinando etnia, edad, sexualidad y género), argumento (lucha contra el destino, conflicto, búsqueda, revelación, con muchos giros) olocalización: en cualquier punto del globo o fuera de él.

La opinión de los profesionales

Aunque por aquí nos fascina la virtualidad (por no hablar de los gifs) y nos pasamos nuestra jornada procrastinando en estas webs desde que las hemos descubierto, de vez en cuando nos ataca la nostalgia de lo analógico y hemos recurrido a tres libreros de carne y hueso para que ejerzan de recomendadores no binarios para los cuatro veranos que se le presentan al español medio:
Verano playero: con carga erótica, fácil de leer, poco predecible y divertido. El clásico, con sus fotos de piernas sobre la arena, mojitos al atardecer y pies a remojo. Enrique, de Venir a cuento, receta a Tom Sharpe y su Exhibición impúdica (Anagrama). María, de Cervantes y compañía, sugiere el Cómo se hace una chica (Anagrama), de la británica Caitlin Moran, mientras que Clea, de La Fugitiva cree que lo mejor es hacerse acompañar de Boris Vian y La espuma de los días.
Vacaciones en el pueblo: perturbadora, con contenido violento, de lectura exigente y tono serio. Las características nacen de ese feliz estado de ánimo fruto del contacto concentrado con familia, niños y señoras que te dicen a la cara que has engordado. Para Venir a cuento, la opción está clara: Ánima, de Wajdi Mouawad (Destino). Cervantes y compañía opta por A.S.A. Harrison y La mujer de un solo hombre (Salamandra). La calle, de Israel Rabon (Círculo de Escritores) es la apuesta de La Fugitiva.
Summer in the city: divertido, optimista, realista, breve. El objetivo es evitar el ansiolítico y verle el lado positivo a ir a trabajar en agosto (¿poca gente en el transporte público? Por decir algo...). Sufridos currantes, prueben, sugiere Clea, con Historia de un servidor, deEdward Limónov (Oriente y Mediterráneo). María va a degüello y recomienda ¿Por qué no se suicida usted?, de Enrique Jardiel Poncela (Espuela de plata) y Enrique remata con el Cándido deVoltaire, en la edición ilustrada de Blackie Books.
Viaje de descubrimiento: toque melancólico, historia bella, de lectura exigente y un puntito erótico. Cargarse una mochila al hombro y convertirse en un ser intenso es todo uno. Imprescindible acompañarse de un libro que vista tu pose viajera. Shiké: samuráis, dragones y zinjas, la epopeya de Robert Shea (Edhasa), es la elección perfecta para Venir a cuento, mientras que Cervantes y compañía se decanta por Marian Engel y su Oso (Impedimenta). El cuarteto de Alejandría (Lawrence Durrell, Edhasa) ha de colarse en su equipaje según La Fugitiva.
Visto en el EL MUNDO.